Reflexión

PALMAS PARA UN JUEZ

Antony Carranza León

Muchos operadores de justicia, dentro y fuera del Poder Judicial, en nuestra Provincia de Chota  así como un sector importante de litigantes, incluido el suscrito, hemos lamentado, con sincero pesar, el cambio de uno de los pocos jueces probos, que hayamos visto pasar por nuestro medio, a decir de muchos, acaso uno de los más reconocidos, por sus innegables dotes personales y profesionales, pasando a ocupar, la merecida y siempre delicada labor, como gran responsabilidad de impartir justicia, ahora como flamante Juez Superior Titular de la Corte Superior de Justicia de Lambayeque, cargo al que obviamente se accede, a través de un riguroso concurso, del cual salió particularmente airoso.

El cambio del Dr. Edilberto José Rodríguez Tanta, sin duda alguna y sin temor a equivocarme, ha sido una baja importante en la conformación de la Sala Superior Liquidadora de la Provincia de Chota, en la cual se desempeñaba de manera reconocida como Presidente.

Esta promoción, ciertamente premia al esfuerzo constante, no sólo por salirse del cuadro del magistrado promedio, sino por los dotes elocuentemente demostrados en toda cuanta actividad jurídico-académica se le requirió en nuestra provincia, sin rehuir nunca a los menesteres de esta índole, demostrando siempre estar a la altura de  las circunstancias; otorgando desde éstas líneas, el agradecimiento respectivo por tan afiladas, actualizadas e inteligentes disertaciones de las muchas que con singular pasión magistralmente impartió, con absoluta claridad en beneficio de ilustrados y legos.

Felicitaciones Dr. Rodríguez por este nuevo reto, que clarísimamente se encumbra como un premio y reconocimiento al esfuerzo tesonero de un digno profesional, que se proyecta hacia las grandes ligas de los jurisconsultos provincianos en nuestro país, del cual muchos jóvenes y cuajados hombres de derecho, en nuestro medio, aún contracorriente, hoy sin mezquindades y con absoluta hidalguía, salimos a reconocer, sien do para aquellos quienes nos consideramos amigos cercanos y no tan cercanos, razón de un sano orgullo por el ejemplo y la capacidad demostrada.

Palmas para Ud.