PROLOGO A
“QUINCE AÑOS DESPUÉS” DE ALEX F.
Juan Lozano Cubas
“Contigo o sin ti me place este infierno” dice el aeda en el sétimo verso del primer poema de este opúsculo. La confesión ante su amada ausente, devela per se un idilio y éste confirma que “Quince años después” es una ópera prima cuyo liev motiv es el amor. Entonces el triángulo perfecto (él, ella, el amor) hace creer que la poesía todavía sigue siendo la oportunidad decorosa para lamentarse ante sí.
De los 26 textos, 24 en verso y dos en prosa, 20 son de tema amoroso. En este abrupto sendero, la poesía de Alex Fustamante Gálvez (Alex F.), es decididamente reminiscente, por eso su título. Y en ella encontramos las diferentes clases de amor: el platónico, pero y, por tanto, quimérico; el correspondido, pero, al fin y al cabo, perdido; el no correspondido, pero, no obstante, entrañable…; auscultemos su nostalgia en estos versos ilustrativos:
“Encontré mi bien sin comprenderlo,/amando lo que nunca ha sido mío” (Eminencia de un sueño). “Buscando vivo lo que no he perdido” (El libertario). “Nunca me dijiste que sí, pero/ tampoco escuché decir que no” (Maestra de amor).
Transido de recuerdos e ilusiones íntimas o personales, el poemario universaliza algunas situaciones que cualquier lector, con ese derecho, puede ha cerlas suyas. He ahí un logro del poeta, conmocionar con su confesión y renunciar a su autoría para trascender. Sin duda, gloria de pocos que saben hacer Poesía, aunque muchos digan que la escriban.
De hecho, al hablar de amor, se tiene que hablar también de la vida, porque para amar hay que vivir y para vivir se tiene que haber nacido. “Porque cada niño que nace,/ trae un mensaje divino de Dios”. Y al hablar de la vida o se acepta la teoría de la creación o la teoría de la evolución.
Los otros 06 poemas son de temática diversa. De contenido social, Puna Runa; de reflexión existencial, Albedrío terrenal, Caída libre y El pagano; de versar laudatorio, Águilas azules; y de admiración metapoética a Vallejo, Con César sin cesar. Para muestra, como dice el dicho, baste un botón de cada uno de ellos:
“El campesino, no es más que / un ser que universalmente ama la tierra” (Puna Runa). “En realidad somos lo que ofrecemos al mundo” (Albedrío terrenal).“Brindaremos por ella o por aquellas/ situaciones vividas y encontradas” (Caída libre).“Soy el signo pagano que mató lo ideal” (El pagano).“Mi trova se asemeja a los místicos/ cuando cantan un gol con frenesí” (Águilas azules).“Una generación proscrita a tu palabra,/espera renacer en los infiernos tu ideal” (Con César sin cesar).
En conjunto, la poesía de Alex F. es contundente. Eso significa que ha logrado el dominio del ritmo interno que, en versos clásicos o libres, sustenta a la poesía, asimismo, conceptúa con madurez sus abstracciones y que, además, dilucida con albedrío sus propias dubitaciones. Por ello, en Tributo el poeta resume acaso el espíritu de su libro de modo controvertido y pertinaz: “Soy el desgraciado más feliz que te ama”
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si no cuentas con ninguna de las cuentas mostradas, marca anónimo, realiza tu comentario y al final escribe tu nombre.